Foto: Rompeviento TV
Realiza sociedad civil cerco al Senado en rechazo a la Ley de Seguridad Interior
Gerardo Campos
“No entiendo por qué el Estado mexicano envía un despliegue de policías antimotines a una protesta pacifica” fue el cuestionamiento de un observador de Derechos Humanos de la ONU que se encontraba documentando lo que sucedía en las inmediaciones del Senado de la República durante el cerco civil convocado para impedir la votación de la Ley de Seguridad Interior.
En el marco de la discusión de la Ley de Seguridad Interior en la Cámara de Senadores, cientos de integrantes de colectivos, organizaciones de derechos humanos y sociedad civil se dieron cita para manifestarse en contra de la aprobación de esta ley, la cual de acuerdo con especialistas representa un duro golpe a la protección de los derechos humanos de la población al otorgar amplios poderes al titular del Ejecutivo Federal para hacer uso de las Fuerzas Armadas en situaciones que, según ellos, consideren de riesgo.
Lo que fue convocado como un cerco pacífico se torno tenso alrededor de las 11 de la mañana, cuando una persona golpeó a un joven de 20 años, identificado como Arturo Flores. Los hechos se dieron cuando el joven participaba en el acto pacifico y una hombre, quien se negó a identificarse, respondió golpeando al manifestante. De inmediato algunos policías de tránsito que se encontraban en la zona custodiaron al agresor para evitar que las personas que se encontraban en el cerco lo atacaran. Minutos después una patrulla se llevó al agresor, mientras elementos de Brigada Marabunta y posteriormente paramédicos atendían al herido.
A pesar de los esfuerzos de los colectivos, organizaciones y sociedad civil por evitar que al interior del Senado se pudieran congregar los legisladores y evitar la discusión y aprobación de la Ley de Seguridad Interior, Gerardo Fernández Noroña y la diputada de Morena Citlali Hernández anunciaron a los manifestantes, quienes se encontraban reunidos en la esquina de Paris y Madrid, que al interior de la Cámara ya existía cuórum para iniciar la discusión y llamaron a realizar un balance de la actividad.
Durante el balance, el padre Alejandro Solalinde llamó a los altos mandos de la iglesia católica a pronunciarse en contra de la Ley de Seguridad Interior, al tiempo que recordó la grave crisis de derechos humanos por la que pasa el país y que ha dejado miles de muertos y desaparecidos.
