Claudia Soriano Segoviano. Psicoterapeuta Gestalt y Psicocorporal
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Las fobias
“El miedo está siempre dispuesto a ver las cosas peores de lo que son“.
Livio
Fobias… muchas personas las padecen. La fobia es un trastorno de salud mental y emocional que se caracteriza por sentir un miedo desproporcionado ante una situación, lugar, ser u objeto. También se considera una fobia al sentimiento de odio, discriminación o rechazo hacia algo. La palabra fobia se deriva de Fobos, pánico en griego.
En la mayoría de los casos, las personas que padecen algún tipo de fobia presentan cuadros de estrés y ansiedad, debido a que aunque sean conscientes de que el miedo que sienten ante lo que les produce la fobia es irracional y desmedido, no consiguen dejar de sentirlo. Si la persona es confrontada con la fuente de su fobia, puede llegar a experimentar una angustia desproporcionada, e incluso la angustia puede surgir simplemente si la persona piensa en su fobia.
El origen de una fobia puede deberse a múltiples causas, sin embargo, de manera general, podemos decir que una fobia se genera a partir de una experiencia traumática, y también por tener un miembro de la familia o del núcleo cercano que tiene una fobia y que progresivamente la niña o el niño va haciendo suya.
No es común que una fobia surja después de los 30 años, la mayoría comienzan en la infancia, adolescencia o edad adulta temprana. Si la causa de una fobia es algo con lo que la persona rara vez entra en contacto, su vida cotidiana no se verá afectada. Sin embargo, hay algunas fobias complejas que son prácticamente imposibles de evitar, como por ejemplo la agorafobia, que es el miedo a salir de casa o estar en lugares públicos.
Hay un porcentaje más elevado de mujeres que padecen fobia que de hombres y es el tipo más común de trastorno de ansiedad.
Algunos de los síntomas más comunes de una fobia son: sensación de angustia incontrolable, incapacidad de funcionar normalmente debido a la ansiedad, sentimiento de impotencia y reacciones físicas como palpitaciones, sudoración y dificultades para respirar.
Algunos de los tipos más comunes de fobia son:
Claustrofobia: miedo a estar en espacios cerrados
Agorafobia: miedo a las multitudes o a los espacios exteriores
Aerofobia: miedo a volar
Zoofobia: miedo a los animales
Acrofobia: miedo a las alturas
Hematofobia: miedo a la sangre
Brontofobia: miedo relacionado con fenómenos naturales como relámpagos, tormentas, precipicios o aguas profundas
Necrofobia: miedo a la muerte y todo lo relacionado con ella
Aracnofobia: miedo a las arañas
Fobia social: miedo a estar en lugares con mucha gente
Amaxofobia: miedo a conducir un vehículo
Una fobia puede ser tratada para que quien la padece pueda vivir su vida cotidiana libre de ella, el éxito del tratamiento dependerá de la gravedad de la fobia. Es importante que quien la padece busque ayuda profesional para tratarla. Lo que generalmente se recomienda es la terapia cognitivo conductual, que ayuda a cambiar los pensamientos que causan el miedo.
También se utiliza el tratamiento basado en la exposición, que implica exponerse gradualmente a la fobia para irla superando. Existen clínicas para tratar las fobias y terapias grupales. En algunos casos pueden prescribirse medicamentos. El médico, psiquiatra y/o psicólogo podrá determinar el tratamiento que la persona deberá seguir, ya que no hay un solo tratamiento que funcione para todo el mundo. Ahora que si la fobia no ocasiona problemas graves será suficiente evitar lo que la provoca.
Espero que esta información haya sido de tu interés. Si deseas iniciar un proceso de terapia puedes mandarme un whatsapp al 5522558651 para hacer una cita. Será un gusto acompañarte.
