Foto: Clara Reynoso RV
2016, el año más violento para la prensa en México: ARTICLE 19
Luz León
El año 2016 fue el más violento para la prensa en México, con un registro de 426 agresiones. Además, en lo que va de la administración de Enrique Peña Nieto, 30 periodistas han sido asesinados, así lo dio a conocer en su informe anual la organización independiente de derechos humanos, ARTICLE 19 México.
De acuerdo con el informe Libertades en Resistencia, las agresiones contra los periodistas continúan en aumento: 7 % más respecto al año 2015, cuando se documentaron 397.
La presentación de Libertades en Resistencia se llevó a cabo esta mañana en el Museo Interactivo de Economía (MIDE). Ahí, la directora de la organización en México y Centroamérica, Ana Cristina Ruelas, señaló que el 2016 destacó como el año con mayor número de periodistas asesinados, con 11 en total.
En este contexto, afirmó que en lo que va de la administración federal de Enrique Peña Nieto, 30 periodistas han sido asesinados, mientras que en el sexenio de Felipe Calderón, ARTICLE 19 documentó 10 homicidios de comunicadores en 2008, 2009 y 2010.
Asimismo, Ana Ruelas declaró que el gobierno mexicano no ha encontrado la solución a la violencia contra la prensa. Por el contrario, ha permitido que las condiciones para ejercer el periodismo se vulneren cada día más.
Al finalizar, la directora de ARTICLE 19 denunció que en lugares marginados, donde no existe el ejercicio del periodismo, el gobierno usa la desinformación como un arma para mantener la ignorancia respecto a ciertos problemas sociales, a fin de controlar a la población. De igual modo, dijo que la organización defensora de la libertad de expresión exige al gobierno mexicano cumplir con su obligación de garantizar el libre ejercicio periodístico y señaló que el poder judicial tiene alta responsabilidad en la garantía de la libertad de expresión.
Por otra parte, Catalina Botero, ex relatora especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), enfatizó que el informe tiene la capacidad de relatar la realidad del México profundo de forma puntual y sistemática.
Botero destacó que el reporte entrelaza los desafíos para la libertad de expresión y los retos para tener un país democrático. Finalmente, aseveró que el periodismo enfrenta dos grandes presiones: la publicidad oficial y la violencia.
