¿3 de mayo o 2 de noviembre?

  • 0

Ricardo González Bernal

Coordinador del Programa Global de Protección de Article 19

@R1card0G0nzalez

 

 

¿3 de mayo o 2 de noviembre?

 

 

Para Khadija Ismayilova y quienes luchan por hacer periodismo a toda costa.

A medida que los organismos internacionales se adentran en la atención de problemáticas de alcance global, a menudo se utiliza la designación de un día específico para conmemorar y dar visibilidad a un tema en particular. El día de ayer tuvo lugar la conmemoración del Día Mundial de la Libertad de Prensa, como se hace desde 1991. La idea es reconocer el valor del ejercicio periodístico como un elemento esencial de la libertad de expresión a nivel individual, pero también como elemento clave para el derecho de la sociedad a estar informada. La prensa está llamada a ser el puente de trasmisión de información entre la sociedad y los gobiernos, entre la sociedad y las corporaciones y, al final del día, entre la sociedad misma.

El panorama no es nada alentador a nivel internacional, el número de periodistas asesinados el año pasado es alarmante (los datos más conservadores documentan por lo menos 72 en 2015), por lo menos 20 periodistas permanecen desaparecidos (más del 40% en territorio mexicano), aproximadamente 200 periodistas fueron encarcelados bajo cargos falsos o políticamente motivados alrededor del mundo. Periodistas y medios de comunicación son acosados judicialmente con leyes injustificadamente restrictivas so pretexto del combate al terrorismo y la seguridad nacional.

Las buenas prácticas, verdaderamente dignas de ser replicadas, son realmente pocas. Prácticamente ningún país tiene un récord totalmente limpio. Ahí están los ejemplos de las “democracias consolidadas” del norte global, en donde la persecución de periodistas críticos y sus fuentes se hace con la ley en la mano. Tanto en esa región como en el sur global, la gran mayoría de estos casos permanece en absoluta impunidad.

Creo que una conmemoración como la que amerita el ejercicio de la libertad de prensa a nivel global, requiere no sólo enfocarse en los logros sino también en los retos que presenta.

Crisis de un modelo de negocios y un renacer del periodismo

Mucho se ha hablado de la crisis que enfrentan los medios de comunicación a nivel internacional, el declive de las grandes corporaciones mediáticas en sus márgenes de ganancia. Sin embargo, y de manera un tanto imprecisa, hay quien insiste en que la crisis del modelo de negocios del periodismo es en sí una crisis del periodismo. Nada más falso, si bien las empresas con modelos tradicionales de negocios están luchando por mantener la calidad de sus contenidos y planta laboral, es un problema financiero-empresarial y no de quienes ejercen la libertad de prensa.

Mientras que esa “crisis” continúa, nuevas formas de periodismo están surgiendo. El periodismo está floreciendo en casi todos los rincones del mundo, con modelos colaborativos, utilizando la tecnología como herramienta de expresión e investigación. Vivimos un momento histórico, en donde podemos atestiguar la existencia de una comunidad genuinamente global de periodistas, que colaboran, comparten… innovan.

Veamos el caso concreto de México, en donde los medios tradicionales son rehenes de las narrativas oficiales dictadas desde las oficinas de comunicación, en donde reporteros y opinantes cantan a coro y, al mismo tiempo, existen ejemplos de periodismo valiente. Tenemos numerosas investigaciones sobre abusos de derechos humanos y corrupción con un nivel impresionante. Como señala Antonio Martínez, “hoy, que vivimos en una de las mayores crisis de derechos humanos de las que se tenga memoria, el periodismo es más necesario que nunca”.

Tal vez, para dimensionar el alcance de la crisis de libertad de prensa que se vive en México, vale la pena recordar que muchos de los periodistas que han publicado investigaciones sobre temas de derechos humanos o corrupción se encuentran en el (sub)desempleo, porque nadie quiere contratarles, porque nadie quiere contravenir al gobierno. A más de un año del conflicto entre el equipo de Carmen Aristegui y MVS, el espacio importantísimo que ocupaba no ha sido restituido, y tanto la calidad como la cantidad de información que llega a la sociedad se han visto evidentemente afectadas.

La punta del iceberg

Los homicidios de periodistas son la punta del iceberg, pero hay más. A nivel mundial, y México no es la excepción, las amenazas (directas e indirectas) continúan siendo la agresión más frecuente en contra de quienes ejercen la libertad de expresión, a menudo, a manos de funcionarios públicos. Claro que debemos todo el respeto a quienes han sido asesinados o asesinadas, pero también debemos voltear la mirada a quienes intentan no sólo sobrevivir sino continuar con su labor informativa.

Los casos de colectivos de periodistas en Ciudad Juárez y Veracruz son ejemplos que debemos reconocer en este día, pero también debemos proteger. Ahí es donde realmente se está jugando el futuro del periodismo mexicano y no en las oficinas de venta de un periódico impreso con sede en la Ciudad de México.

En 2013, ante el incremento sostenido de asesinatos y violencia en contra de periodistas en el mundo, la UNESCO decidió designar el 2 de noviembre como el “Día Internacional para acabar con la impunidad en crímenes en contra de periodistas”. Creo que un 3 de mayo requiere tener en mente el 2 de noviembre.

La impunidad es la mayor amenaza al periodismo. Impunidad en casos de agresiones físicas. Impunidad en casos de despidos injustificados o explotación laboral. Impunidad de los protagonistas de las historias de corrupción y abusos que investigan los periodistas.

Tal vez, más que un sólo día, necesitamos emprender un proceso de reflexión que comience el 3 de mayo y dure hasta el 2 de noviembre. Un día para clamar justicia, lamentablemente, no es suficiente.

La emisaria de Peña Nieto para una foto falsa
Atrás La emisaria de Peña Nieto para una foto falsa
Siguiente Familiares de Berta Cáceres y COPINH desconfían de investigación oficial
Entradas Relacionadas

Escribir comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *