Firma gobernador de Texas ley antiinmigrante SB 4
Paola Atziri Paz
El gobernador de Texas, Greg Abbott, firmó este domingo la Ley SB 4, aprobada la semana pasada en el Congreso, que busca prohibir las ciudades santuario, así como castigar a las autoridades, condados y universidades que no colaboren con agentes de inmigración.
"Los texanos esperan que mantengamos a la gente segura y eso es exactamente lo que vamos a hacer al firmar esta ley", dijo Abbott antes de firmar el documento mediante una transmisión en vivo por Facebook desde el Capitolio de Texas.
Además, el gobernador firmó una enmienda aprobada la semana pasada por la Cámara de Representantes que permitirá a los agentes de policía cuestionar el estatus migratorio de las personas detenidas en Texas.
"Como gobernador, mi máxima prioridad es la seguridad pública, y este proyecto de ley promueve este objetivo al mantener criminales peligrosos fuera de nuestras calles", afirmó el republicano durante la promulgación de la ley que en esta ocasión, a diferencia de otros actos de este tipo, no contó con público ni prensa.
En su cuenta de Twitter escribió: "Esta noche he firmado la ley que prohíbe las ciudades Santuario en Texas. Duras penas para los infractores".
A pesar de que los demócratas argumentaron que la medida podría caer en la discriminación racial y que jefes de policía de Texas se opusieron a la iniciativa, la ley entrará en vigor el próximo 1 de septiembre. Algunos de los principales puntos de esta legislación son:
- Autoriza a policías locales a pedir el estatus migratorio de las personas detenidas
- Obliga a las autoridades carcelarias a cooperar con Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE )
- Autoriza el recorte de fondos federales a las ciudades que no cumplan con la ley o las medidas establecidas
- Otorga a los ciudadanos la facultad de denunciar a cualquier institución que no coopere con los servicios de inmigración
- Las autoridades que no acaten la Ley SB 4 pueden ser castigadas con un año de cárcel y multas de hasta 25 mil dólares.
En Texas viven alrededor de 1.5 millones de inmigrantes indocumentados y el 40 por ciento de la población es latina, así lo informó Frank Sharry, director ejecutivo del Fondo de Educación Vocacional de Estados Unidos.
De acuerdo con los críticos de la ley, los inmigrantes indocumentados estarán en constante peligro, ya que podrán ser detenidos y expulsados si intentan denunciar haber sido víctimas de cualquier delito o abuso.
